Etiquetas

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Roy Hart, la filosofía de la voz teatral

En nuestra vida diaria usamos la voz sin premeditar su forma expresiva.
Sin embargo, a la hora de actuar los requerimientos son muy diversos e implican un desafío importante para el actor.

El actor debe ser capaz de trasmitir ideas y conceptos, no solo con su discurso, sino con su entonación, con el fin de revelar emociones e incluso contextos que otorguen un sentido profundo a su relato. 

De ahí la necesidad de entrenar la voz. Esta debe poder ampliarse, modificarse y responder a los vertiginosos impulsos y demandas creativas. 

Porque no todas las risas, llantos ni susurros son iguales, los actores deben conseguir agilidad para trasformar la voz y la habilidad de darle particularidad a cada texto o gesto vocal.

Por muchos años el trabajo clásico, de impostación de la voz, fue la única técnica impartida. Pero desde finales del siglo XX comenzaron a surgir otros métodos y planteamientos de trabajo, principalmente en Europa, que hoy son la base del aprendizaje vocal para los futuros actores de todo el mundo.

Uno de esos métodos es el Roy Hart , del mismo nombre que su autor, quien fundó su compañía Roy Hart Theatre (http://www.roy-hart-theatre.com/site/) y cambió los códigos con los cuales se comprendía y estudiaba la voz teatral.

La actriz y directora de la escuela La Maquina del Arte (http://www.lamaquinadelarte.cl/web/), Ángela Cabezas, cuenta a MTE que hasta, más o menos, el año 2000 las escuelas de teatro, en Chile, enseñaban únicamente la técnica clásica de impostación o proyección de la voz. Pero que en los últimos años, y principalmente debido a la influencia del Pantheater (http://www.pantheatre.com/) y la maestra brasileña Paula Molinari, el Roy Hart se posicionó como un elemento fundamental para la preparación vocal del actor: “EL Roy Hart no es una técnica, sino una filosofía y una manera de ver el trabajo vocal. Te enseña que tu voz depende de tu cuerpo, por lo tanto, depende de tu psiquis”.

El método utiliza diversas maneras de liberación vocal, como por ejemplo imágenes para sonar, imágenes que afectan psicológicamente para modificar cuerpo y voz. Lo fundamental es que siempre es desde el trabajo corporal. “Porque es un trabajo de liberación vocal a partir del movimiento. Es el cuerpo el que genera la voz, por eso el trabajo vocal se volvió de pronto muy orgánico entre la voz y el movimiento”, afirma Ángela.


Roy Hart y Wolfsohn

Fue el más destacado discípulo de Alfred Wolfshohn, un profesor de canto alemán, quien trabajó con las patologías vocales de sus alumnos de canto. Él descubrió que estas no tenían que ver con cusas físicas sino psicológicas. 
Su interés se enfocó, entonces, en entender la raíz del espectro de sonidos emitidos por el hombre, en situaciones determinantes de la vida, que le llevó a replantearse el potencial de la voz humana.


Roy Hart estudió historia de la música y psicología en Sudáfrica. Continuó sus estudios en Londres, donde conocería a Wolfsohn, quien se convertiría en su mayor influencia artística, y quien lo motivó a integrar los conocimientos vocales y psicológicos a las técnicas de expresión.  

Creó un estudio y una compañía de teatro, que le permitieron difundir su método que él mismo definía como 51% arte, 49% terapia.